SEGURIDAD Y SALUD

El principal activo son nuestros trabajadores. Su seguridad y el fomento de la cultura preventiva son objetivos clave para la industria cementera, uno de los sectores más seguros del país

La industria cementera española considera la seguridad y salud de sus trabajadores la piedra angular de su actividad. Por ello, desde hace décadas, se dedican grandes esfuerzos para desarrollar acciones de prevención, minimización de riesgos y protección de los trabajadores.

Política sectorial de seguridad y salud

Más allá del esfuerzo realizado para implementar las mejores tecnologías y prácticas disponibles en el ámbito de la seguridad, nuestro objetivo es seguir manteniendo una cultura preventiva. Como consecuencia, el sector cementero se ha convertido en uno de los más seguros de la industria española:

En busca de la excelencia en seguridad y salud

Las empresas cementeras realizan múltiples acciones para promover la seguridad y la salud en el trabajo, más allá del cumplimiento de la normativa, como por ejemplo:

  • proyectos de concienciación sobre seguridad,
  • acciones de promoción de la salud
  • objetivos internos de observaciones preventivas y cero accidentes
  • benchmarking sectorial que les permite detectar posibles oportunidades de mejora

Menos accidentes con incapacidad temporal

Desde el año 2005, la frecuencia de accidentes se ha reducido un 75%. El índice de frecuencia, que expresa el número de accidentes por cada millón de horas trabajadas.

Líder en Seguridad

El índice de frecuencia de accidentes con incapacidad temporal del sector cementero fue en 2023 fue:

  • un 83% menor que la industria en general
  • un 67% menor que el sector servicios
  • un 87% menor que el sector de la construcción

Más información disponible en los informes estadísticos de Oficemen.

Contribuyendo al uso seguro del cemento

Oficemen ofrece a las empresas cementeras y a las partes interesadas, la información necesaria acerca del uso adecuado del producto en las Fichas de seguridad del cemento.

El sector se ha adaptado a los cambios requeridos por la exigente normativa europea sobre sustancias y preparados químicos (Reglamento 1907/2066 (REACH), Reglamento CE 1272/2008 de clasificación y etiquetado de sustancias y mezclas), adicionales a los que exige la normativa de productos de construcción.